Mi vuelo

No, no por favor no vayan a creer que soy una fumona, no, solo quiero contarles acerca de mi primer vuelo en avión, de esas infernales 2 horas 20, para recorrer cerca de 2.000 kilometros por el aire sobre el Pacifico, para ir desde la playas de Iquique al centro de Chile, Santiago, la capital.

Muy nerviosa estaba, miraba y miraba. Media hora antes de que el vuelo se iniciara me dieron unas gotitas tranquilizantes, luego me metieron en una jaula y me entregaron en el Counter y de ahí, para que les cuento, ya que no volví a ver a mis papis hasta la llegada al aeropuerto y me retiraran desde la huincha transportadora.

Medio somnolienta me subieron abajo del avión despues de todas las maletas. Los ruidos eran atroces, era como un terremoto grado 10, después... sostenerme para no caer con ese despegue que subía y subía. Era como estar dentro de una trituradora, ese ruido infernal estaba ahí mismo, donde yo estaba, era ensordecedor -menos mal a uno de mis papis se le ocurrió ponerme unos tapones en las orejitas- y así fue la cosa, igualita de ida y de vuelta. Cuando salía de la jaula salía contenta, ahí estaban esperándome, medios preocupados y yo ni les contaba mi experiencia en la guata del pajaro de acero, ¿para qué?. Me hacian cariño y me daban un trocito de embeleco y como una dama, aquí no pasó nada. Conocí otros aires, otros paisajes y del susto del viaje en avión ya ni me acuerdo.